El Frente Progresista reunió en la Universidad de Avellaneda a todos los candidatos a legisladores nacionales, provinciales, concejales y consejeros escolares.
El objetivo: trazar líneas de discurso para unificar a todos los partidos y militantes, distribuir la agenda de recorridos para cubrir todo el territorio provincial, los materiales con las propuestas, y recuperar una mística de trabajo para esta segunda etapa de la campaña electoral.
Animados por las últimas encuestas que se conocieron en el Frente ya se han puesto como objetivo dejar al kirchnerismo atrás en la elección bonaerense y mostrarse como el único frente que tiene desarrollo territorial en todo el país para poder competir y gobernar en el 2015.
Margarita Stolbizer, cabeza de la lista de candidatos a diputados nacionales pronóstico el fin del kirchnerismo: “Ingresamos en la etapa final del ciclo kirchnerista. No habrá reforma constitucional ni habrá Cristina candidata en el 2015. Por eso ya hay muchos que se cruzan de vereda y los del otro lado los reciben con los brazos abiertos” y agregó que “el problema es que seguirán siendo los mismos, con las mismas prácticas y los mismos vicios y negocios, pero se van a parar del lado de los que en lugar de agredir y descalificar, sonríen y les dicen a todos lo que quieren escuchar. Pero seguirán siendo los mismos. Frente a eso, tenemos que crear una verdadera tensión junto a la sociedad, sobre los cambios que se reclaman y se esperan y la incapacidad de producirlos por parte de quienes han sido parte del problema”.
Para Stolbizer “Somos el único frente que puede construir la alternativa de reemplazo frente al fin del kirchnerismo. Porque tenemos la fuerza nacional, con liderazgos federales, pero sobre todo porque somos los únicos que tenemos la fuerza moral para hacerlo. Esa fuerza que radica no solo en la honestidad de quienes integran este frente, sino por la fortaleza de las convicciones de nuestros militantes.”
Ricardo Alfonsín por su parte aseguró que “muchos de los males actuales tiene que ver con el hecho de que la Argentina se convirtió, de hecho, en un país con régimen de partido único”.
“Que ninguna fuerza se sintiera capaz de desafiar la hegemonía electoral del oficialismo, hizo que éste se sintiera invencible, omnipotente y actuara con la actitud propia de quien se siente dueño de la verdad” y agregó que “Si nuestro Frente no estuviera construido con la intención de trascender el calendario electoral y de reconstruir el sistema de partidos para garantizar la alternancia, reuniendo a los que piensan muy parecido, no tendría tanta importancia. La intención es trascender el calendario electoral y convertirlo en un nuevo y permanente actor social y político nacional”, puntualizó Alfonsín.